El Servicio de Emergencias Sanitarias de Castilla y León atendió a nivel de toda la comunidad en el primer semestre del año una media de 700 llamadas diarias, y un total de 127.903, de las que el 16 por ciento fueron debidas a traumatismos.
Este número de llamadas se tradujo en la atención directa a 128.699 personas, y la movilización de 161 vehículos, entre ellos ambulancias y helicópteros medicalizados.